Tras su ajustado y sorpresivo triunfo en las PASO de Santa Fe, el ex jefe de la bancada del FpV en Diputados y actual parlamentario del Mercosur se prepara para volver al Congreso Nacional. “El peronismo tiene que estar conforme”, dice.
Fue la cara más visible de los parlamentarios del Frente para la Victoria entre el 2005 y el 2011. Le tocó lidiar nada menos que con la aprobación o el rechazo de la Resolución 125 en el 2008, mientras se desarrollaba un fuerte lock out de las patronales agrarias, unificadas en la Mesa de Enlace que conformaban la Sociedad Rural, la Federación Agraria, Coninagro y Confederaciones Rurales Argentinas.
Tras ocho intensos años en la Cámara de Diputados, como jefe de bloque del FpV, Agustín Rossi intentó ser gobernador de su provincia, Santa Fe, que perdió a manos del socialista Antonio Bonfatti. Antes, en la interna justicialista, había superado a Omar Perotti.
En 2013 fue convocado para el Ministerio de Defensa por Cristina Fernández, cargo que ejerció hasta el fin del mandato. Fue precandidato a presidente en el 2015, intención que abandonó tras un pedido presidencial de evitar las internas.
Kirchnerista paladar negro, peronista de los disciplinados, Agustín Rossi no acumula prácticamente denuncias tras haber ejercido cargos públicos durante más de 15 años. Actualmente es parlamentario del Mercosur, elegido en 2015, cargo que ejerce ad honormen porque el gobierno de Mauricio Macri decidió que esos legisladores no debían cobrar su dieta.
Tras su ajustado y sorpresivo triunfo en las PASO de Santa Fe, Rossi volvió a transformarse en un personaje buscado por los medios de comunicación. Así es que recibió a Socompa durante unos minutos, en un hermoso y remodelado bar de Congreso, mientras su histórica jefa de prensa, Salomé, atendía el teléfono y respondía mensajes que lo requerían sin parar.
Vuelta al ruedo
“Las encuestas nos marcaban que íbamos a tener una elección pareja y competitiva. Sabíamos que íbamos a tener una elección de estas características, pero tampoco nos hubiese sorprendido perder por 3 o 4 puntos”, dice para empezar el Chivo Rossi.
“El fuerte de nuestra elección fue Rosario –agrega–, allí el Frente Justicialista juntando los votos nuestros y los de Alejandro Rodenas hizo que hiciéramos una excelente performance. De todas maneras, se viene repitiendo casi el mismo perfil de votos, como sucedió en las últimas elecciones. El Frente Justicialista, peronismo, Unidad Ciudadana, o como se llame, termina ganando en Villa Constitución, Rosario, San Lorenzo, polo industrial de la provincia, y el norte y la costa, que es donde hay más gente con necesidades básicas insatisfechas. En esos lugares también hay una economía informal muy importante, y se ha sentido mucho la recesión.”
Tras este triunfo provincial, que le valió un llamado y una reunión con la ex presidenta y líder de Unidad Ciudadana, que a tono con los nuevos tiempos se transmitió por Facebook live, es muy probable que después de octubre Agustín Rossi vuelva a ser legislador. “Antes de eso, y de las expectativas, tenemos que mencionar que acá hay un hecho novedoso, que es el que justicialismo hacía mucho tiempo no ganaba una elección en Santa Fe. Después sí, la expectativa es repetir en las elecciones generales lo bueno que hicimos en las primarias, e incluso poder mejorarlo. Lo que quedó claro en la provincia de Santa Fe es que el peronismo es el único espacio opositor. Vamos a hacer una convocatoria amplia a todos aquellos que tienen un pensamiento crítico respecto de lo que está haciendo el Gobierno nacional, para que nos acompañen. La opción para ganarle a Cambiemos es el Frente Justicialista.”
La reunión con CFK
El martes, dos días después de las PASO, y tras irse confirmando los resultados, en Facebook live –y después replicado por varios medios– pudimos ver una distendida charla entre Cristina Fernández y Agustín Rossi, los dos ajustados ganadores en Buenos Aires y Santa Fe. “Tuvimos una comunicación el domingo a la noche, y me llamó el lunes para ver cómo había terminado Santa Fe y yo tenía que venir porque tenía agenda acá. La llamé para ver si nos podíamos juntar y pudimos vernos.”
El Chivo reconoce que el de Cristina es un gesto político importante, no obstante prefiere distender y señalar que “hacía mucho tiempo que no la veía a Cristina personalmente, habíamos tenido contacto telefónico porque todo este tiempo en campaña prácticamente no me moví de Santa Fe. Así que esta posibilidad de encontrarme con ella me da mucha alegría. Y la verdad que la vi muy bien, muy jovial, con mucho ánimo”.
El peronismo
Rossi es peronista, qué duda cabe, y lo inscribe como el centro de la construcción de un espacio político opositor. “Me parece que el peronismo en todas sus variantes tiene que estar conforme. Hay un desafío que es construir la oposición en la Argentina, porque está claro que el oficialismo es Cambiemos y seguramente está conforme con la elección. Por eso el desafío es construir una alternativa de gobierno para ponerle freno a Macri en estas elecciones primero y en el 2019 después.”
Como diría el General, peronistas somos todos. Qué hacer, entonces, con aquellos justicialistas que no forman parte de Unidad Ciudadana ni del kirchnerismo. Rossi lo resuelve fácil. “Cuando yo hablo del peronismo lo hago en forma amplia, hablo del campo nacional y popular. En el caso de Florencio Randazzo está claro el error que cometió al no haber aceptado las múltiples ofertas de integrarse al espacio. Porque está claro que iban a ser unas primarias no competitivas, si uno saca el 5% y el otro el 35%, la verdad que no tenía ningún sentido llevar a cabo esa primaria, salvo la obcecación política. Ser obcecado en la política no termina conduciendo a nada. El rechazo a las distintas formas de integración que se le planteó al sector de Randazzo fue lo que generó esta situación. En el futuro, me parece que la convocatoria tiene que ser lo más amplio posible.”
El ajuste tan anunciado
Para Agustín Rossi, el peronismo tiene el desafío de organizar a la oposición. Para él está claro que el gobierno continuará con sus políticas y no corregirá el rumbo económico. “No hemos visto ninguna señal en ese sentido –asegura–, de ahí la necesidad de tener senadores y diputados que vayan a frenar esta política de ajuste es más que evidente, porque el gobierno ha anunciado una reforma laboral y otra previsional que claramente van en contra del conjunto de los argentinos”.
Claro que, dada la composición del Congreso, no será fácil para el oficialismo hacer votar leyes que, además, modifiquen otras leyes. Sin embargo, esto fue así desde el 2015 y no fue obstáculo para que se votaran leyes importantes para el Gobierno, con la ayuda del Frente Renovador de Sergio Massa y de algunos parlamentarios que rompieron con el FpV y se quedaron con Diego Bossi. En ese sentido, Rossi cree que “estas elecciones también sirvieron para legitimar actitudes políticas, y en ese sentido creo que en el campo opositor las conductas que fueron más legitimadas fueron las conductas de aquellos que durante este tiempo fueron más claramente opositores. Por eso creo que lo que hay que construir es la alternativa opositora. En todo caso la democracia argentina no carece de oficialismo, de lo que carece es de oposición, que sea una alternativa más organizada y más contundente. En ese camino está lo que intentamos construir con Unidad Ciudadana y el Frente Justicialista. En provincia de Buenos Aires, está claro, que el único espacio que garantiza que el oficialismo no se imponga somos precisamente nosotros, Unidad Ciudadana. Lo mismo sucede en Santa Fe. El espacio político que garantiza la resistencia a las políticas de ajuste que se implementan está claro que es el Frente Justicialista”.
El futuro
Agustín Rossi fue el histórico jefe de bloque del FpV durante el kirchnerismo. Su vuelta al Congreso, de ratificarse los resultados de las PASO, lo coloca otra vez en un lugar protagónico, acompañado esta vez de los buenos resultados en la provincia de Santa Fe. Volverá a ser jefe de bloque? “La verdad que no estoy pensando en eso. Falta mucho todavía, recién terminamos las PASO, faltan todavía las elecciones generales y veremos entonces lo que sucede con el bloque, cómo queda conformado. No escapo a que haya especulaciones sobre mi persona, porque fui muchos años presidente de bloque y el actual no renueva su mandato. Entonces es natura que se especule sobre eso, pero no estoy pensando en eso”.
“Mi energía está puesta en la provincia de Santa Fe”, dice el Chivo, y a propósito de eso dentro de dos años habrá elecciones para gobernador, y se le recuerda que él ya fue candidato dos veces y estuvo muy cerca, en el 2011, de poder ganar. “Ese fue mi momento –señala Rossi–, sentía que estaba preparado y tenía el equipo para gobernar. Ahora realmente no estoy pensando en eso, no lo tengo en la perspectiva.”
Y se va, apurado, el Chivo. Otro que está volviendo.