Ya nada parece ser como entonces. Pero, ¿distinto de qué forma? Jorge Bernárdez y Luciano di Vito hablaron con gente que escribe hoy y que escribió antes para que cuenten sus experiencias, sus cambios y sus malas adaptaciones En el recorrido que recoge #ElFinDelPeriodismo, los creadores de Vida y Vuelta se meten con el estado general del oficio, el destino de las empresas periodísticas y reflexionan sobre lo que hacen las redes sociales con nuestra necesidad de información.
Se sabe: el periodismo está atravesando una etapa de transformación en sus soportes y modos de producción a consecuencia del cambio tecnológico. La mutación, marcada por la irrupción de las redes sociales y una reconfiguración que llevó, en su costado más dramático, a la pérdida de puestos de trabajo, redefinió a los periodistas de hoy, que no son los mismos que hace veinte o treinta años. De la Olivetti se pasó a la PC, las redes reemplazaron ominosamente al fotógrafo, el teléfono y el mail suplantan una cobertura en vivo, el archivo ahora tiene forma de Wikipedia, Google y YouTube. Mucho de eso impregna #ElFinDelPeriodismo, el nuevo libro de Jorge Bernárdez y Luciano di Vito, así, con título en formato de hashtag.
Antes del libro habían publicado Las aventuras de Perón en la Tierra, un compendio de historias y anécdotas en torno al tres veces presidente. “Nos insistían con un segundo libro, más anécdotas de Perón”, recuerdan. “Fuimos a un bar y vimos un canal de noticias, con el presentador hablando y detrás pibes escribiendo en computadoras, le dije a Jorge que eso parecía un call-center”, señala Di Vito. Ahí nació la idea. Los creadores de Vida y Vuelta, el recordado ciclo de la TV Pública que trató con informes y testimonios temas tan diversos como el golpe del 66 o la figura de Benjamín Solari Parravicini, pusieron manos a la obra y reunieron doce entrevistas. Por el libro desfilan Enrique Vázquez, Any Ventura, Ernesto Cherquis Bialo, Fernando González, Gerardo Rozin, Rubén Oliva, Teresita Ferrari, Jorge Fernández Díaz, Fernando Cerolini, Beto Casella, Carlos Ulanovsky y Cecilia Absatz. Todos cuentan sus experiencias en primera persona.
“Juntamos como quince entrevistas, pero el libro iba a tener recuadros, notas históricas, mucha miscelánea”, dice Bernárdez. “Se nos iba de las manos, algo de más de 400 páginas. Optamos por dejar sólo los testimonios de los entrevistados, que cuentan cómo fueron sus años en el periodismo”.
Así, el libro final, reúne doce testimonios sobre el periodismo de antes y el de ahora, los cambios, los pros y los contras.
-¿Cómo armaron el listado de entrevistas?
-Bernárdez: No queríamos caras muy conocidas, llegamos a tener como treinta nombres. Les planteamos cómo era el proyecto y fuimos a la carga. Primero con Absatz, después con Fernández Díaz. Hablaron tanto que después buscamos que los otros también se explayaran.
-Di Vito: Buscamos periodistas, no tipos que se hubieran corrido al costado empresarial. Fernández Díaz era un límite. Es columnista de La Nación pero sigue siendo periodista, escribe libros. Vos ves la foto de los premios Konex y están Lanata, Majul, son empresarios. De los que entrevistamos no hay uno que le haya cobrado un millón al Estado por un video.
-¿Hubo alguno que los sorprendió?
-Di Vito: Beto Casella fue una sorpresa. No lo conocíamos, como tampoco conocíamos a muchos. Lo vimos un sábado a la mañana, en el único momento libre que tenía. Hicimos la entrevista en un bar, como casi todas las entrevistas del libro. Eso creo que los liberaba a hablar.
-Bernárdez: La condición era que todos hubieran pasado por redacciones y vivido el cambio de las máquinas de escribir a la PC. Any Ventura nos contó de lo traumático que fue eso en Atlántida. Por eso es que en la edición final sacamos entrevistas a periodistas más jóvenes. A lo largo del libro se cruzan nombres en común. Aparece mucho la revista Humor, Daniel Kon, Daniel Pliner, el primer Perfil…es una camada de la que no se ha escrito mucho.
-Di Vito: Hay un apotegma que dice que cuanto más pasa el tiempo es mejor para acercarse. Eso permite ver en perspectiva al Perfil del 98, el Tiempo Argentino de Rául Burzaco, mismo al Tiempo Argentino de ahora. Como que cambió el paradigma, antes llegabas a Abril o Atlántida y tenías que saber algo más que leer o escribir.
-Bernárdez: Alsina Thevenet se quedaba viendo los créditos de las películas y anotaba la ficha técnica a mano.
-Di Vito: Y en la crítica de cine arrancaron García Márquez y Tomás Eloy Martínez. Cherquis Bialo se acuerda la formación de los equipos del primer partido que le tocó cubrir. Pero volviendo a la pregunta, otro que sorprendió fue Cerolini.
-Que les aportó la historia del hijo de Discépolo.
-Bernárdez: Claro, la incluimos al final de su entrevista. Cuando contactamos a todos los entrevistados para saber si querían chequear algo de lo que habían dicho, el que más pendiente estuvo de eso fue Cerolini, y de pasó nos tiró esa historia.
-Di Vito: Aparte que entrevistar a Cerolini era algo que se justificaba. No se puede ignorar un fenómeno como la revista Pronto, que tiene títulos extraordinarios. Es el último eslabón contra los focus-groups, va en contra de eso.
-Rozin dice algo que llama la atención, quizás porque es el más joven: que hay que saber escribir para poder conceptualizar.
– Bernárdez: Él está orgulloso de su pasado en la gráfica, cuando comenzó en Rosario/12, y después en La Prensa y Perfil…la suya es una de las historias que remite al primer Perfil. Están él, Absatz, Fernández Díaz…
-Di Vito: En esa época yo estaba con Chiche Gelblung en la radio y ví la contratapa de Fontevecchia anunciando que era el último número, nadie la había visto y fui a cubrir la toma de la redacción. Ahí nos vimos también con Jorge, así que los dos autores conocemos mucho de ese episodio.
-En el libro hay dedicatorias a periodistas que, intuyo, hubieran querido entrevistar: Tomás Eloy Martínez, Norberto Firpo, Néstor Ibarra…
-Di Vito: Sí, claro. Trabajé con Ibarra, y fue el tipo más honesto y coherente que conocí en los medios, de una ética absoluta.
-Y hacen hincapié en la gráfica.
-Di Vito: A mi me jode que para buscar archivos haya que ir a Parque Rivadavia. Este país es caníbal en materia de archivos. Hay colecciones que no están completas, no se digitaliza. Eso marca un atraso muy grande.
-Bernárdez: A mí me gusta la historia, pero no somos nostálgicos. El periodismo son los periodistas, que siguen estando. Mirá La Garganta Poderosa o Panamá Revista o Hecho en Bs. As. Lo que no va a haber más son tiradas de medio millón, hoy se le habla a otra gente.
-¿Cómo influye el tema de las redes sociales? No por nada pusieron el título en forma de hashtag.
-Di Vito: Twitter es la tapa de todos los diarios ahora, pero no tiene artículos de -fondo, se queda en las tendencias.
-Bernárdez: ¿Pero, qué podés aprender en Twitter? A escribir bien seguro que no.
-Di Vito: Sirve como hecho, pero no para informar. Lo mismo con Facebook.
-Bernárdez: Ahora la gente se pasó a Instagram: cero textos, pura foto de gatitos.
Di Vito: Las redes son un manicomio a cielo abierto, mucho narcisismo, deben tener algunaa falencias en sus vidas.
-¿Por dónde pasa el presente y el futuro del periodismo?
-Di Vito: Las plataformas. Miremos lo que hicieron las cadenas estatales de TV en Europa. Aparte que abaratás costos. Acá tenés la telefonía móvil más cara de América, un remis a 70 kilómetros te sale lo mismo que el micro a Mar del Plata. Así no se puede, conspira en contra y terminas apostando más al teléfono o al mail que a una cobertura en vivo. Sin plataformas vamos al muere.
-Bernárdez: Yo creo que los medios tradicionales fingen demencia. Los canales no existen. Los barrió Netflix, una plataforma. Acá hay cosas inentendibles. Tenemos la crisis del papel, y sabemos que seis meses antes de rajarse, Szpolski quería lanzar un diario gratuito de 60 páginas.
-Di Vito: Bueno, Clarín perdió lectores, pero ganó plata en la Bolsa. La radio, como medio, si no está en un multimedios, no funciona. Ahora está Radio Con Vos, que es de Endemol y parece viable, tiene una estructura detrás. El papel seguirá siendo irremplazable, aunque se lo considere algo Premium, porque por ahora recauda más que Internet. La gente no compra tanto on line. El tema es cómo se escriben los diarios hoy. Los diarios se escriben como en la web, pero resulta que Internet empieza a producir textos como los que antes leíamos en los diarios. Yo insisto con la idea de las plataformas, es inadmisible que no se apueste a eso, aparte que genera más trabajo.
-Bernárdez: Fijate que la ley de medios nació obsoleta, sin contemplar Internet. Y encima resultó inviable para que haya radios de universidades, sindicatos y movimientos sociales, sin dinero suficiente para afrontar eso.
-¿Quedó material para una segunda parte?
-Bernárdez: Claramente. Daniel Kon, que aparece nombrado varias veces, para mí merece un libro aparte.
-Di Vito: Nos llegaron muchos testimonios a partir de la lectura del libro. Por ejemplo, se me acercó un periodista que pudo ir tres veces a Malvinas en la guerra, o la historia del diario en el exilio de los Montoneros. Son buenas historias, pero habría que contextualizar.
-Bernárdez: Así es. Aparte que lo nuestro fue periodistas hablando de periodismo y de periodistas.
-Llama la atención la diversidad de géneros en el libro: periodistas de política, de deportes, de información general, de espectáculos…
-Bernárdez: Buscamos varios géneros. Lo pensamos como una revista. Incluso al comienzo casi ni teníamos mujeres, y cuando las incluimos, en las entrevistas salió el tema del machismo, que es impresionante.
-Di Vito: Sí, es vox populi, si un entrevistado no daba bola, mandaban a una mina. Hoy se enojan y está muy bien que así sea. Y también el ombliguismo. Pudimos poner a un tipo como Oliva, un capo, que en Italia con sus documentales mostró el fraude del voto electrónico y evitó que Berlusconi lo implementara, que además describió a la mafia…el famoso libro Gomorra de Roberto Saviano es todo material que antes había descubierto Rubén. Yo creo que logramos una línea media interesante, todos pasaron por el periodismo gráfico, y nos gustan los que hacen bien las cosas.
-Bernárdez: Una vez en la tele lo tuve a Sergio Wolf y le pregunté si lo debía presentar como periodista o director de cine y me dijo “Alguien de los medios”. Yo creo que en el fondo somos todos así. Te hago gráfica, pero también radio y TV. Por eso conviven los formatos y sobrevivimos como todos los argentinos.