Una nueva nota de la serie de la investigadora Carola Ochoa sobre los rugbiers víctimas del terrorismo de Estado. Hoy recordamos a Pablo “Palito” Marcelo Córdoba, rugbier y entrenador de Club Regatas de Bella Vista y militante de la Juventud Peronista. Fue secuestrado el 8 de junio de 1977 en Villa Urquiza.

Pablo “Palito” Marcelo Córdoba tenía 26 años cuando fue secuestrado. Era Rugbier y entrenador del Club Regatas de Bella Vista, situado en San Miguel, en el noroeste de Buenos Aires, y militante de JP. Nació en San Miguel el 28 de diciembre de 1951. Hijo de María Angélica “Beba” Lamas y Marcos Córdoba. Su mamá fue una de las primeras “Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora”

Sus amigos y compañeros le llamaban “Palito”. Se recibió de Bachiller en el Colegio Don Jaime y comenzó a estudiar en la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Nacional de Buenos Aires (U.B.A.), donde su compromiso social y estudiantil lo llevó a sumarse a la Agrupación 26 de Julio. Militando en el Barrio Muñiz conoció a su novia. Ana María Cabrera. Al tiempo se casaron y tuvieron 3 hijos.

Militancia sindical y secuestro

Palito trabajaba en la semillera “La Germinadora”, ubicada en Roosevelt 5459, Villa Urquiza. Allí era muy querido por sus compañeros.

En juicio, se probó que Pablo fue secuestrado el 8 de junio de 1977, frente a su lugar de trabajo por personas vestidas de civil y con armas, que se movilizaban en dos autos particulares. Militaba en la juventud Peronista.

Ese día, horas antes del secuestro, esas personas se presentaron en la empresa de semillas, requiriendo la urgente presencia de Palito. Pablo no había llegado aún, pero los secuestradores permanecieron en las inmediaciones esperandolo. En el momento en que Pablo se encontraba cruzando la calle hacia un depósito de la empresa, los miembros del operativo le gritaron: “¡Córdoba!”  e inmediatamente lo secuestraron. Lo introduciéndolo en uno de los autos y velozmente dejaron el lugar en medio del estupor de sus compañeros de trabajo.

Ese mismo día fueron allanadas su casa, la de sus padres y el domicilio de una médica vecina.

Cautiverio en El Vesubio

Pablo fue llevado al Centro Clandestino de Detención, Torturas y Exterminio “El Vesubio”, utilizado por el Ejército que estaba ubicado en la localidad de Ciudad Evita (partido de La Matanza, en el Gran Buenos Aires), cerca del cruce del Camino de Cintura con la Autopista Riccheri que lleva al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, en un terreno del Servicio Penitenciario Federal.

El sobreviviente Hugo Luciani relató: “Compartí con él el cautiverio, y me decía que su esposa estaba embarazada y la niña que nacería iba a llamarse Lourdes. Que extrañaba muchísimo a su mujer, por lo que las medias rojas de ella que se había puesto el día del  secuestro, lo hacían estar mas junto a ella”.

Pablo fue sometido a largas sesiones de torturas. Sus familiares realizaron muchas gestiones judiciales y extrajudiciales, a fin de dar con su paradero, pero nunca pudieron volver a ver a Pablo con vida. Ni siquiera tuvieron la posibilidad de saber cómo lo asesinaron.

Juicio y Sentencia

El Tribunal Oral Federal Nº 4 dio a conocer este viernes los fundamentos del fallo que, el 14 de julio de 2011, sentenció a prisión perpetua a Héctor Gamen y Hugo Pascarelli e impuso penas de hasta 22 años y medio de prisión a otros cinco imputados

En la sentencia, cuya parte dispositiva fuera leída en la audiencia de debate del 14 de julio de 2011, los jueces Leopoldo Oscar Bruglia, Jorge Luciano Gorini y Pablo Bertuzzi condenaron a prisión perpetua a Héctor Gamen y Hugo Pascarelli.

En tanto, José Néstor Maidana fue condenado a 22 años y medio de prisión; Diego Salvador Chemes, a 21 años y medio; Ricardo Néstor Martínez y Ramón Antonio Erlán, a 20 años y medio y Roberto Carlos Zeolitti, a 18 años.

El mismo tribunal condenó luego a prisión perpetua al excoronel de Inteligencia Cacivio, al exjefe del área militar Antonio Minicucci, al exjefe de la Central de Reunión de Información que funcionó en el regimiento de La Tablada, teniente coronel Jorge Raúl Crespi, y al exagente penitenciario Néstor Norberto Cendón, destinado en El Vesubio por el Batallón de Inteligencia 601 del Ejército.

Homenajes a Palito

En el 2013, la sesión del Concejo Deliberante de San Miguel contó con un momento emotivo cuando se le realizó un homenaje al militante peronista Pablo Marcelo ‘Palito’ Córdoba,

Con la presencia de Beba Córdoba, madre de ‘Palito’; las autoridades del municipio, se reconoció la labor del militante oriundo de San Miguel.

Ante el aplauso de los presentes, el jefe comunal le entregó un diploma a la madre de Pablo Córdoba, quien agradeció el homenaje a su hijo.

Baldosa en su memoria

Junto a la baldosa en honor a Pablo se recordaron a los demás 53 militantes del barrio de Villa Urquiza, detenidos ba y desaparecidos por el terrorismo de Estado llevado adelante durante la última dictadura militar argentina.

La Mesa por Memoria y Derechos Humanos de la Comuna 12, una organización que diseña y gestiona políticas de Memoria en los barrios de Villa Urquiza, Villa Pueyrredón, Saavedra y Coghlan. A cuarenta y tres años del golpe de estado, recordaron a Palito y a las demás víctimas del genocidio en el acto que se realizó el viernes 22 de marzo de 2019 en la esquina de Monroe y Triunvirato.

Los hijos de Pablo en el TNHRD

Lucas y Lourdes, los hijos de Palito, músico él, médica ella, participaron de la 2° Edición del Torneo Nacional Homenaje a los Rugbiers Desaparecidos- La Plata 2017.

Disertaron sobre su padre, teniendo en cuenta a lo largo del relato, de su solidaridad genuina en su vida personal, en la cancha de su club, en el ámbito laboral y militante.

En mayo de 2018, Lucas estuvo presente en la “Reunión de Familiares del TNHRD”, llevada a cabo en el Espacio de Memoria Virrey Ceballos, situado en Capital Federal, donde se comprometió a crear la canción oficial de los torneos, ya que Lucas Córdoba es un talentoso productor, autor e interprete musical. Su obra, que fue grabada en las instalaciones del Estudio Átomo, de Capital Federal, inmortalizó a través de la música la memoria de su padre y 153 militantes mas fue presentada en la 3° edición Rosario 2018.

Además, la gran artista Livia Canzi y Brian Carlson le dedicaron su recordación, retratándolo.

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