Detrás de la represión a los mapuches y de su demonización hay una trama económico-política en torno a la propiedad de los territorios. Una policía que usa los caballos de Benetton y que sabe ya de esto de desaparecer gente es parte de un Estado que ya se sabe para quién trabaja. (La primera parte de esta entrevista se puede leer aquí).

Bajo el actual gobierno, y a dos meses de la desaparición de Santiago, con una investigación que avanza poco en concreto, cómo ven desde la comunidad la posibilidad, o no, de un diálogo político, que permita una resolución. ¿Cuáles son las condiciones necesarias para que se lleve a cabo?

– Como comunidad siempre estuvimos abiertos al dialogo. Lo único que hemos recibido por parte del Estado es represión y un compañero desaparecido. Y la cárcel, obviamente. La prisión del lonko, y la cantidad de judicializados  más de 30. En estos dos años y medio que llevamos de recuperación, judicializaron a compañeros de la comunidad y a compañeros que se solidarizan. La única respuesta que hemos tenido es esa. Si bien el pueblo mapuche es un pueblo que sabe dialogar también es un pueblo  muy aguerrido, es un pueblo que resistió y resiste más de 500 años de la invasión del Huinca, de los españoles que llegaron en los barcos. 140 años de la “conquista del desierto”… Y como lucharon nuestros antepasados, nosotros vamos a seguir resistiendo en el lugar. No vamos a permitir ningún tipo de abuso por parte del gobierno, ni del Estado. Uno se da cuenta de que el estado no tiene ninguna intención de dialogar con las comunidades. El pueblo mapuche, en estos ultimos 20 años, muchísimos peñi asesinados en recuperaciones de tierras, en las mismas cárceles, en estos… montajes no se como se quiere decir… hemos tenido muchos peñi caídos en batalla.  Caídos y  desaparecidos. Como acá Santiago Maldonado, el compañero. Como Lucinda Quintupuray, en Cuesta del Ternero. Como el caso de los peñi Calfullanca acá en Cholila. Es algo que se viene sintiendo desde hace muchísimos años. Y ahora, lamentablemente con esto de Santiago, como que recién ahora… a la gente le cuesta tomar un poco de conciencia. A uno esto le causa rabia, tristeza porque  no tienen que pasar estas cosas, para que la gente se dé cuenta en qué mundo estamos viviendo. Santiago Maldonado era un muchacho muy consciente, que respetaba la naturaleza de la misma manera que la respetamos nosotros, aunque no fuera  mapuche. Entendía muy bien que esta lucha que estamos llevando hoy, no es una lucha solamente para el pueblo mapuche. Es una lucha para toda la sociedad en general. Eso es lo que se tiene que dar cuenta la gente. Y tomar conciencia que las mineras, las multinacionales, los terratenientes, no vienen solamente por los mapuches sino que vienen por el pueblo argentino pobre y los pequeños productores.

-Benetton posee más de 900.000 hectáreas. ¿Ustedes  están reclamando una fracción de esa superficie?

 –Ahora estamos planteando la devolución de este cuadro  recuperado, pero formamos parte de un movimiento muy amplio que incluye varias comunidades, que planteamos la expulsión del Huinca extranjero, la expulsión de Benetton. Si bien hoy estamos recuperando este territorio y estamos conviviendo acá hace dos años y medio, esto es una recuperación para las comunidades y es un proyecto de vida para la gente mapuche, para que pueda volver al territorio. Para que dejen de vivir hacinados en la ciudad, para que dejen de vivir en los pedreros, en los areneros. Uno lo que plantea y alienta a la gente es que se anime a volver al territorio, que recupere la tierra, las tierras que fueron robadas por los huinca, por los extranjeros, y poder vivir dignamente como mapuches. Vivir como mapuche no significa vivir en la total pobreza. El pueblo mapuche antiguamente era muy rico. Rico en sabiduría, rico en lo que es la vida en el campo, rico en animales, Para nosotros la riqueza no es tener los bolsillos llenos de plata.  Eso para nosotros no existe.

En qué estado están las causas que les abre Benetton a los de la comunidad?

 -Precisamente el Lonko Facundo junto a otras personas han sido judicializadas por usurpación y abigeato. Son causas que están en proceso, ahí a la espera de que sean resueltas. Hace unos dias se conoció un documento que probaría que el tatarabuelo de Facundo habitaba aquí desde 1904. De hecho, los primeros planos que salen de este cuadro eran tierras fiscales. Si bien dicen que no estaban habitadas por gente, son lugares que nuestra gente siempre ha usado para traer sus animales a pastorear.  Y de repente, desde que comenzó la Compañía inglesa en ese momento, hasta Benetton.., que compró 900.000 hectáreas y ahora  tiene más de un millón.

-¿Cómo es la relación con el resto de las comunidades? ¿Han recibido apoyo desde un principio?

– Hemos tenido acompañamiento de las comunidades de la zona, desde antes de la recuperación, porque uno también ha acompañado. Hace unas semanas salió un comunicado de todas las comunidades del departamento de Chushamen, solidarizándose con la familia de Santiago Maldonado y exigiendo la libertad del lonko Facundo Jones Huala.

Ustedes como mapuches tienen una concepción del territorio q va más allá de las fronteras de los Estados…

-Sí. Todavía hay comunidades que conviven entre las dos fronteras, que nos han sido impuestas. Hay gente de acá que tiene familia en lo que es el gulumapu, en Chile. Hay familias nuestras  que hasta hace dos o tres generaciones  transportaban animales para intercambiar.

Se intenta instalar por parte de algunos medios, que si uds recuperan acá el territorio, luego eso los avalaría de alguna manera a ir por todo Esquel, por ejemplo…

Eso es una cuestión muy burda. Es algo que nosotros no  planteamos. Es más, nosotros sabemos convivir con la gente. Si bien uno está planteando la recuperación de la tierra, eso no significa que uno vaya a querer recuperar ciudades, porque son lugares que ya están contaminados, hay mucha gente que quizas no tiene nada que ver con los capitalistas, gente pobre,  gente que no es mapuche que vive en las ciudades y que son también  víctimas de la opresión del Estado.

-En el rastrillaje que se ordena el 18 de septiembre, varias personas que estábamos cubriendo  el corte de ruta policial frente a la entrada a la estancia de Leleque, y esperando para saber cómo estaban aquí ustedes, veíamos entrar y salir  policías de la estancia. Vimos policíaa montada que nunca salió del territorio. No era la única vez que pasaba y es algo que ustedes vienen denunciando.

 -Anteriormente donde está el destacamento de policía ahora, había un almacén. Hoy  es una comisaria que responde a Benetton, ellos tienen el suministro de combustible adentro de la estancia. Benetton tiene comprado al pueblo de El Maitén. Tanto la policía del destacamento  de Leleque como la  de Maitén responden a Benetton. El gobierno responde a Benetton ya que es el que paga los aguinaldos de los trabajadores municipales de lo que es la localidad de Maitén. Dicen que Benetton es bueno dicen porque dona al hospital y a las escuelas  los animales que se le mueren en el campo de viejos. Pero  es el que no deja sindicalizar a los trabajadores, a los puesteros, que los tiene en condiciones lamentables. La policía montada, se mueve con los caballos que tienen la marca de la Estancia, de la Compañía Tierras Sud. La policía y el Estado responden a Benetton.

-El 18 de septiembre se vio un despliegue de  fuerzas impresionante. Camiones, colectivos, helicópteros, drones, montada, policía provincial,… 

-Hasta el grupo especial antiterrorista de la policía federal estaba. Los efectivos le dijeron a los peñi que  venían a enfrentarse con la RAM. Que a ellos los mandaban del Ministerio de Seguridad y con ametralladoras, con los pelirgros que supone para nosotros Ese grupo  antiterrorista, estaba como muy exaltado, muy alterado y quisieron dispararle a uno de los peñi que no habian podido agarrar.  Cuando volvimos al territorio, pensando que el operativo había terminado, porque empezamos a ver que se estaban yendo las camionetas, nos encontramos con este grupo aquí en la guardia y venia uno de los peñi a caballo y el encargado del grupo les da la  orden “carguen”, “apunten”… con las ametralladoras, y fue una situación muy desesperante. Le dijeron que si se acercaba  a menos de 200 metros le iban a disparar. Eran alrededor de las 6 y media de la tarde. Decidimos volver para el monte donde estábamos y esperar hasta la noche para poder volver, pero no sabíamos que iba a pasar en ese momento. Esto es algo importante a denunciar. Porque ya desaparecieron un compañero y que después de eso vengan así, supuestamente a enfrentarse con terroristas, cuando acá lo único que les hemos hecho fue tirarles piedras. Me parece algo muy absurdo y estúpido por parte de la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich. Muchos dicen que acá no se puede pasar, que esto es un territorio que no pueden andar, y no es así. Acá viene gente a pescar, deja los autos.

-Algo que quieran agregar, comunicar, desarrollar

-Es necesario que la gente se levante. Que todos los pueblos originarios se levanten. Pero para nosotros en especial, que el pueblo mapuche se levante, tome conciencia, de qué es lo que estamos planteando, de qué es lo que se plantea en la recuperación de tierras. Es importante que la gente pierda el miedo. Porque hay mucha gente que está de acuerdo pero tienen miedo a las represalias que puedan tener por parte de la policía, grupos parapoliciales o el Estado en general. Tenemos que ser firmes en lo que pensamos, hacemos y decimos y no tener miedo. Nuestros antiguos dejaron la vida por nosotros, para que nosotros hoy estemos acá y nosotros también dispuestos a dejar la vida por las generaciones que vienen.

Que los distintos pueblos originarios se movilicen, que dejen de ser  mano de obra barata, que dejen de ser explotados, que dejen de ser sumisos. Que alcen la voz bien alto y que de una vez por todas tenemos que echar a todos estos Huinca capitalistas de nuestro territorio. Que dejen de contaminar nuestro territorio. Que dejen de matar a nuestra gente.

Luego de la entrevista, compartimos un delicioso guiso entre chistes y noticias. Para ese entonces la ronda se había agrandado y éramos aproximadamente diez personas. Faltaba Santiago.