El TOF de Mar del Plata dictó fuertes penas contra integrantes de varias organizaciones neonazis, nucleadas en la banda Bandera Negra, que asolaron la ciudad atlántica durante más de dos años. (Foto de portada: Mauro Rizzi)

En tiempos que el accionar de ciertos sectores de la Justicia argentina parece ir a contramano de la historia cuando se trata de violaciones de derechos humanos, el Tribunal Oral Federal de Mar del Plata dictó un fallo ejemplar, con condenas que no tienen precedentes, a los integrantes de grupos neonazis que durante más de dos años actuaron con impunidad en esa ciudad.

Resistencia de los acusados luego de la sentencia. (Foto: Mauro Rizzi)

Las penas que dictadas por los jueces Roberto Falcone, Mario Portela y Bernardo Bibel, de manera unánime, son “por organizar -o formar parte- de una agrupación destinada a imponer sus ideas y combatir las ajenas por la fuerza o el temor; por el delito de pertenecer a una organización y realizar propaganda basada en ideas o teorías de superioridad de una raza, religión o grupo étnico”.

“Los delitos perpetrados por los acusados incitan al odio, a la hostilidad, a la discriminación, a la violencia, todos sentimientos destructivos del orden social y democrático”. Alan Olea, Gonzalo Paniagua y Oleksander Levchenko recibieron las penas mayores, condenados a nueve años y seis meses de prisión; Nicolás Caputo a ocho años y seis meses, y al igual que Giuliano Spagnolo, condenado a cinco años y seis meses de prisión. Todos esperaron el fallo con prisiones domiciliarias y luego de la lectura debieron ser reducidos por la policía en la misma sala del tribunal, ya que intentaron resistirse a ser trasladados. Ahora deberán cumplir sus condenas en el Unidad Penal 28 de Magdalena.

Bandas violentas de fachos

En realidad se trata de varias organizaciones íntimamente relacionadas entre sí. La más numerosa es FONAPA – La Giachino. Se trata de una organización ultranacionalista liderada por Carlos Gustavo Pampillón. Surgió en junio de 2011 cuando el Concejo Deliberante marplatense  – a instancias de la Comisión Permanente por la Memoria, la Verdad y la Justicia- retiró del recinto de sesiones el cuadro del fallecido capitán Pedro Giachino, primer muerto en la toma de Malvinas, considerado un héroe de esa guerra hasta que se descubrió su participación en la represión ilegal de la última dictadura. FONAPA irrumpió en el recinto en plena sesión e intentó reponer el cuadro en su lugar. Desde ese momento, comenzaron a aparecer en Mar del Plata manifestaciones de esta organización con lemas como “Zurdos al Paredón”, “Memoria Completa”, “Juicio y Castigo a Montoneros” y “Capitán Giachino Presente”. En su informe, la Asamblea identificó con nombre y apellido a 31 integrantes del Foro.

Una de las “selfies” con que se mostraban en las redes sociales.

En las elecciones de 2015, Pampillón apoyó la candidatura  del representante de Cambiemos, Carlos Arroyo, hoy intendente de Mar del Plata. En uno de sus numerosos mensajes de apoyo, el líder de FONAPA escribió: “Arroyo es nacionalista y defiende los mismos valores que yo; acá le dicen todos que es nazi”.

La segunda es la filial marplatense del Frente Skinhead Buenos Aires (FSBA). A nivel nacional, la conduce Claudio Kalaka D’ Arpino, un aspirante frustrado a policía federal que lideró ataques a periodistas durante manifestaciones en Buenos Aires. El 24 de marzo de 2014, en Mar del Plata, un grupo de FSBA agredió a uno de los organizadores de la marcha por la Memoria, La Verdad y La Justicia. La Asamblea denunció ante la Justicia marplatense a siete integrantes del Frente.

Otro grupo identificado es Bandera Negra, una organización neonazi que toma su nombre como sátira del movimiento anarquista.  Está liderada por Alan Olea, yerno de Pampillón. Según el informe, sus miembros están involucrados en una serie de delitos de odio y actos violentos. Señala también que sus militantes intentan reclutar menores en las puertas de las escuelas. Su estrategia de propaganda incluye las actuaciones de un grupo musical de RAC (movimiento internacional de rock anti comunista) cuyo nombre es Six Millon More (seis millones más), en alusión al holocausto judío. La Asamblea identificó a cuatro de sus miembros. La rama femenina de Bandera Negra se autodenomina, también de manera satírica, Rosas Rojas y su jefa es, según denuncia el informe, Mailén Pampillón, hija del líder de FONAPA.

La patota de La Giachino.

Finalmente, la Asamblea por una Sociedad sin Fascismo de Mar del Plata señala la existencia de otra organización conocida como la Banda del Rusito, especializada en agresiones físicas a personas por su género, orientación sexual, nacionalidad, ideología o religión. También realiza pintadas discriminatorias con simbología nazi. Está liderada por Alexander Levchenco, “El Rusito”, y el informe incluye a otros cinco integrantes a los que identifica con nombres, apellidos y alias.

Los datos no dejan dudas de la articulación que existe entre las cinco agrupaciones. Además de participar en acciones conjuntas y tener discursos con inocultables coincidencias, las relaciones familiares entre los líderes de tres de ellas terminan de cerrar el cuadro.

Detenciones, preventivas y condenas

En 2016 la entonces procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, ordenó la creación de un equipo de trabajo integrado por los titulares de las fiscalías federales 1 y 2 de Mar del Plata, Laura Mazzaferri y Nicolás Czizik, para que intervinieran “conjunta o alternativamente en las causas que tramiten en ese distrito, vinculadas con actos de discriminación” contemplados por la ley antidiscriminatoria o sancionados por el Código Penal.

Una de las manifestaciones reclamando justicia por el accionar neonazi.

La decisión de la ex procuradora tuvo como consecuencia que varias causas que se estaban tramitando por separado en la justicia provincial se unificaran en el fuero federal. Menos de un mes más tarde, ya había seis detenidos y otros dos procesados por asociación ilícita. La identidad de los procesados también deja a las claras que la Justicia Federal considera que existen fuertes vinculaciones entre las diferentes organizaciones neonazis que operan en Mar del Plata.

Los primeros en ser detenidos fueron Alan Olea, yerno de Pampillón, y Gonzalo Paniagua y Nicolás Caputo, conspicuos miembros de Bandera Negra. Poco después se sumaron a la lista Alexander Levchenko y Giuliano Spagnolo, pertenecientes a la “Banda del Rusito”, y por último fue capturado en Ushuaia – donde se había ocultado – Franco Pozas, del Foro Nacional Patriótico (Fonapa) que lidera Pampillón.

Ahora, al dictar las condenas, los jueces señalaron que  “los graves hechos que se han ventilado en la audiencia oral han generado en nuestra ciudad un envenenamiento del clima social. Los acusados profesan una ideología totalitaria, racista y violenta, la dinámica del odio que estimula la ideología nazi conlleva a buscar la reafirmación frente al otro, frente al diferente, mediante la violencia, el objetivo ante el distinto, el inferior, el no ario primero es hacerlo callar para después alejarlo y finalmente exterminarlo”.