La Policía de Río Negro desalojó y sitió una “recuperación territorial” cerca de El Bolsón. Por orden de la Justicia, impiden el ingreso de abrigo y alimentos a miembros de la comunidad Quemquemtreu, que soportan hace 5 días temperaturas extremas en el bosque. Con apoyo de organizaciones de derechos humanos, acudirán a la Corte Interamericana. Un “campamento humanitario” custodia el accionar de las fuerzas de seguridad.

Para la justicia rionegrina, permitir el ingreso de abrigo y alimentos para socorrer a miembros de una comunidad mapuche implicaría consolidar “la usurpación por la cual ya se formularon cargos”. Con ese argumento, en una demorada audiencia judicial realizada este miércoles en Bariloche, el juez Ricardo Calcagno rechazó el pedido de asistencia para las personas que desde el viernes resisten en la reciente recuperación territorial realizada por la comunidad Quemquemtreu, a 30 kilómetros de El Bolsón.

Cuesta del Ternero es una de las paradisíacas zonas boscosas, a la que se accede por la ruta provincial 6, que sufrió el avance de las llamas en los incendios forestales que en marzo arrasaron con bosques y hogares. Allí, el 18 de septiembre, una comunidad mapuche inició un proceso que denominó de “recuperación ancestral”, en tierras utilizadas décadas para veranada y ahora poseídas por el empresario forestal Rolando Rocco.

Durante la madrugada del viernes 24 de septiembre, medio centenar de efectivos del Cuerpo de Operaciones Especiales y Rescate de la Policía de Río Negro (COER) ingresó al territorio y secuestró elementos como, colchones, frazadas y alimentos; y detuvo a cuatro miembros de Lof Quemquemtreu. La comunidad denunció que durante el operativo, los efectivos violentaron al menor de 8 años, Antu Morales, que luego relató: “Me apuntaron, me tiraron al piso. Me pusieron una rodilla en la espalda”.

Otros integrantes de la comunidad, lograron escabullirse en la montaña, y desde entonces permanecen en el lugar, que fue acordonado por los efectivos para impedir el ingreso de personas o asistencia, por orden de la justicia.

Alertados por la situación humanitaria, organizaciones de derechos humanos y la Coordinadora del Parlamento Mapuche Tehuelche de Río Negro presentaron, sin éxito, primero un habeas corpus y luego un pedido para que se abra una mesa de diálogo y se permita el ingreso de alimento y ropa de abrigo. Además, convocaron a establecer un “campamento humanitario” en la zona del conflicto, tanto para acercar asistencia como para observar el accionar policial. Pernoctan allí, cada noche, unas 40 personas.

“Con el correr de los días, la situación se va agravando porque quedó gente resistiendo dentro del territorio, a quienes no dejan ingresarles elementos básicos para la vida de cualquier ser humano”, cuestionó Romina Jones, integrante de la comunidad, desde el acampe, y planteó que teme por la integridad física “de nuestros lamien (hermanos)”. La cercanía física y temporal con otro violento desalojo hace la referencia ineludible: “No queremos que haya otro Rafa Nahuel. Nos vamos a quedar en el acampe hasta que las fuerzas represivas se retiren del lugar. No podemos generar un diálogo cuando están persiguiendo a nuestra gente a tiros por la montaña”, dijo, en relación a la represión del grupo Albatros de la Prefectura que derivó en el asesinato por la espalda del joven mapuche.

Orlando Carriqueo, Werken (vocero) de la Coordinadora del Parlamento Mapuche participó de la audiencia con el juez Calcagno y lamentó la decisión de la justicia: “Priorizan la propiedad privada, que ni siquiera es privada, por sobre la vida”. Al respecto, en diálogo con Socompa, afirmó que se trata de tierras fiscales de las que Rocco “no tiene título de propiedad ni habita” y que le fueron otorgadas como “fiscalero” pese a ser un empresario, situación que, aseveró, “está prohibida por la ley”.

Ante lo que consideran una grave situación humanitaria, Carriqueo anticipó que ya trabajan en una presentación ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, para que interceda con urgencia. Comunicó, además, que desde el territorio en disputa le confirmaron que, pese a las gélidas madrugadas y la escasez de alimentos, resolvieron permanecer en el lugar.

En los últimos días, la comunidad Quemquemtreu recibió el respaldo del premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien remitió una carta a la gobernadora rionegrina, Arabela Carreras, advirtiendo que la comunidad mapuche “se encuentra en una situación de emergencia humanitaria a raíz del accionar de violencia del Estado que no reconoce su derecho al territorio”.

También Nora Cortiñas, titular de Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, expresó públicamente su solidaridad “con este pueblo que está sitiado en una privación de su libertad, que no le permiten entrar alimentos”. Advirtió que las Madres Línea Fundadora “lo denunciamos al mundo”, porque “queremos que sean respetados los derechos humanos de estas poblaciones, especialmente en Cuesta del Ternero”.

Paradojas de la resistencia mapuche, las fuerzas de seguridad montaron su centro de operaciones para reprimir la recuperación en la Escuela Primaria N° 211 “María Lucinda Quintupuray”, establecimiento que lleva el nombre de una pobladora mapuche que se negaba a vender sus tierras y que fue asesinada a balazos en 1993, a los 79 años, en su casa de Cuesta del Ternero, en un hecho aún sin esclarecimiento.

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