La banda nacida en Lanús acaba de editar “El bar de los errores”, con catorce temas que relatan los sufrimientos y desamores de un grupo de personajes que frecuenta la misma cantina desde hace años.
No siempre las bandas musicales intentan con su estilo enraizarse en las costumbres heredadas. Se puede escuchar música sin saber de dónde provienen sus ejecutantes. Como si un estilo no dependiera del lugar donde crecieron los músicos. No es el caso de Sobra Milonga que con su producción intentan hacerse fuertes en su propio terruño tratando de rescatar esas tradiciones que hoy para muchos pasan casi inadvertidas. Sobra Milonga es una banda que hace confluir en sus trabajos diversos estilos de la música popular pero en la que la marca rioplatense es la que más se nota. Rock, tango, cumbia, candombe son las principales influencias, aunque la presencia de la milonga en el nombre no pase para nada inadvertida.
Sobra Milonga acaba de editar su segundo disco que lleva por nombre El Bar de los errores. El mismo contiene catorce temas que relatan los infortunios y desamores de un grupo de personajes que frecuenta la misma cantina desde hace años. Leandro Godoy “Leky” (uno de los fundadores del grupo) dice que esos personajes “Son tipos que se quedaron detenidos en el tiempo, los atrapó el bar y no pudieron salir. Siguen ahí. Todos tenemos algún conocido, un familiar, o un amigo que se quedó atrapado allí”. No hay escapatoria a menos que, “cuando la orquesta empieza a sonar hace que cambie todo” sostiene Leky el creador de todos estos antihéroes. Para él la música es la salida a ése – y a todo- laberinto.
La banda que tuvo sus inicios allá por el 2005 en Lanús había ya editado un disco anterior que llevaba el nombre de Vivir al revés. “Este es un disco mucho más arriba que el anterior –asegura Leky-, tienen mucha participación los caños y eso le da más mucho más power a la banda. Tiene otros ritmos también. Hay un par de cumbias, hay fragmentos de cuarteto, por momentos es medio candombero. Siempre dentro del género canción. Tratamos de producirlo un poco más que el anterior. En el Bar participó la murga “5 pal peso” que la rompe. También grabó Juani Rodríguez de Andando Descalzo” dice.
Sobra Milonga está integrada por once músicos, todos ellos del barrio de Lanús. Leandro Godoy (voz y teclado), Jorge Echeverría (guitarra), Luciano Vaccaro (batería), Francisco Miguens (bajo), Carolina Galli (coro), Maxi Tartaro (saxo alto), Adrián Pérez (saxo tenor), Walter Aquino (trombón), Fernando Madato (trompeta), Nicolás Novosad (percusión) y Fernando Alarcón (Acordeón).
El nombre del grupo proviene de una canción que Leandro Godoy compuso cuando adolescente. “Si, una milonga, de un pibe de 16 años. No esperes mucho de eso, pero nos dio el nombre de la banda, mas no le podemos pedir” dice hoy.
Cruzando el puente Félix Uriburu desde Capital en dirección de la Provincia, lo primero que se divisa a mano derecha es un mural que reza: “Lanús, barrio milonguero” acompañado de un logo grande con el nombre de Sobra Milonga. El lugar es estratégico y el mensaje es claro. De esas cinco palabras hay dos –barrio y milonga- que resumen a la perfección la identidad de esta banda que parece comprender a dónde va, pero lo que mejor entiende es de donde viene.