“Yo no soy un buen músico; soy un buen tanguero”
En 1973, dos años antes de la muerte de Pichuco, la revista Crisis publicaba esta entrevista en la que también participó Zita, su mujer. Habló de Fiorentino, de su padre que le regaló una guitarra a Gardel, de su enfermedad, de su admiración por Piazzolla, de cómo componía y de sus pasiones, Un Troilo de pura cepa.
Leer más