En medio de las protestas por el proyecto UniCABA del gobierno de la ciudad, la ministra de educación hizo llegar un documento donde repite las mismas falacias que viene difundiendo por los medios. La rectora de uno de los profesorados muestra que el único afán del gobierno es maltratar a los docentes, desalentar a los alumnos y ajustar los gastos.

Seguramente no le interesará demasiado a la ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires Soledad Acuña que yo escriba esta respuesta, ya que se niega sistemáticamente a recibir a los 29 Rectores/as de los profesorados que planea desintegrar de un plumazo. Pero como represento a una comunidad que me ha votado para estar en el cargo de Rectora, me veo en la obligación de responder a cada uno de los puntos que refiere en la carta, tratando de llevar información y de no sumar mayor incertidumbre a quienes ya de por sí se encuentran angustiados y enojados por todo lo que viene sucediendo. Necesitamos llevar tranquilidad a nuestras instituciones y esta carta contribuye en sentido contrario.

Como todo lo que sucede desde el 22 de noviembre de 2017, recibimos sorpresivamente por las redes el día 21 de mayo una carta firmada por la Ministra, destinada a la comunidad educativa de la Ciudad de Buenos Aires. No nos llegó por ningún correo oficial ni institucional, sino por un archivo viralizado. Todo un dato de cómo se considera desde el ministerio de Educación a nuestras comunidades de las instituciones afectadas, que ni siquiera amerita de su parte el envío de información oficial. ¿O acaso ahora van a decir como con el primer protocolo antitoma que ellos no lo mandaron y que “no pueden controlar todo lo que se envía”?

Vamos por partes, porque esto es largo.

Comenzaremos por señalar el párrafo en negrita que alude a “el enfoque está puesto en cómo enseñamos a enseñar”. Sobre esto, dos señalamientos: el primero tiene que ver con el retiro del término “enseñar” en todos los documentos oficiales, que aluden siempre al aprendizaje y no a la enseñanza. Resulta llamativo que ahora se retome el concepto, ya que sólo se lo menciona para cuestionar nuestra tarea y rol docente. Sin embargo, como ya hemos visto en las declaraciones de la ministra, existe un total desconocimiento de su parte respecto de cómo se enseña no solamente en nuestros profesorados sino en la jurisdicción a su cargo, tal como le ha respondido el colectivo de profesores y especialistas en enseñanza de la Matemática, frente a sus últimas declaraciones. Allí se señala además el desconocimiento de los documentos curriculares y materiales didácticos por parte de la Ministra.

En la carta también se menciona “la necesidad de formar docentes para un nuevo perfil de estudiantes”. Parece que tenemos que recordarle nuevamente a la Ministra que los planes de estudio de la formación docente de CABA, que se elaboraron como siempre se hace teniendo en cuenta el perfil del egresado que se actualiza y reconsidera en cada modificación curricular, datan de 2014/15, y corresponden a un proceso encarado por la gestión del mismo signo político que la Ministra comparte. Estos planes aún no cuentan con egresados, dada la duración de las carreras de entre 4 y 5 años según cada caso.

La Ministra expresa en la carta que “no se cuestiona la capacidad de los egresados para dar clase”lo que constituye una mentira a la luz de sus declaraciones públicas respecto de la enseñanza de la Matemática en la entrevista con Mauro Viale, y que fueron el motivo de la declaración del colectivo de profesores de Matemática referido anteriormente. No solamente se cuestionó la capacidad en esta entrevista sino en tantos otros espacios en los medios a donde se viene erosionando la autoridad de conocimiento de los docentes, refiriéndose a ellos de diversas formas despectivas: “les cuesta el cambio”; “tienen miedo”; “tienen intereses políticos” (como si fuera algo negativo para la enseñanza); etc.

Respecto a lo que alude en el punto 1) que refiere a la formación inicial y continua de los estudiantes, la ministra nuevamente desconoce lo que ya existe en nuestros profesorados: se realiza un seguimiento de las trayectorias de los estudiantes, apoyado en la figura de los tutores académicos; se participa en la adaptación de los planes de estudio como se lo hizo en las mesas de trabajo previas a los planes 2014/15; se “flexibilizan” los formatos de cursada cuando esto no implica pérdida del nivel académico, como por ejemplo en las modalidades semi presenciales previstas reglamentariamente o la flexibilización de los sistemas de correlatividades. ¿De qué innovación está hablando la ministra entonces?

En el punto 2) alude a la formación y la carrera del docente universitario, de una universidad que no existe. Es decir que mientras habla de un docente que no existe hoy bajo su órbita, omite explicar a quienes sí están a su cargo cómo resolverá las innumerables cuestiones que le vienen siendo planteadas tanto en términos laborales, pedagógicos, profesionales, etc. En este punto muestra además otra vez su desconocimiento acerca de la trayectoria de investigación y acciones de extensión que llevan adelante nuestras instituciones, sobre todo aquellas que cuentan con la ventaja de tener todos los niveles del sistema educativo dentro de ellas y así poder realizar experiencias de innovación dentro del propio ámbito institucional, marco que sólo permite la unidad académica existente en Escuelas Normales e IES.

Luego continúa diciendo que “en este proyecto garantizamos la estabilidad laboral, antigüedad y salario”, por supuesto no explica de modo alguno cómo lo harían dado que estatutariamente está claro que no puede ser garantizada la situación de interinos y suplentes, que conforman el grueso de los docentes de nivel terciario ya que la propia gestión del ministerio de Educación de CABA no ha llevado a cabo los procesos de titularización que debería tener de manera permanente, carencia que agrava la falta de reglamentación de la Ley de Concursos, también responsabilidad de quienes gobiernan.

Después refiere a la posibilidad de hacer un Ciclo de Complementación Curricular: otra vez la Ministra parece desconocer que esto ya existe conveniado desde la propia jurisdicción y con diversas universidades estatales y privadas. Muchos de los egresados de nuestros profesorados lo han hecho, han obtenido sus licenciaturas e incluso se desempeñan como profesores en nuestras propias instituciones. Nuevamente justifica la creación de una nueva universidad con algo que ya existe desde hace más de 15 años. Si quiere favorecer esto, puede becar a aquellos que quieran hacerlo a donde este ciclo resulta arancelado o incluso otorgar licencias para hacer este ciclo a quienes lo realicen en universidades a donde se hace gratuitamente.

A continuación,  refiere a una organización departamental de la universidad, que no ha sido nunca referida, explicada, fundamentada y menos aún debatida en ámbito alguno. Como en todo lo demás, aparecen afirmaciones inherentes a un proyecto oculto, que se construye a espaldas no solamente de las comunidades implicadas sino también de los propios legisladores responsables de discutir este proyecto, por la propia decisión que la Ministra ha tomado.

Sobre la validez nacional de los títulos a emitir, incurre nuevamente en un mero voluntarismo de “se iniciarán los trámites” para obtenerla, omitiendo intencionalmente explicar el tiempo que tarda dicha tramitación y la situación de precariedad que esto generaría en el “mientras tanto” a las cohortes de estudiantes que estuvieran cursando. Si bien esta contundencia en su declaración deja entrever un posible “arreglo” de tratamiento preferencial o express por parte del ministerio de Educación de la Nación para su otorgamiento, esto mismo abre un manto de sospecha respecto de la responsabilidad en el proceso de evaluación que siempre ha caracterizado a la CONEAU como organismo de control en términos de las aprobaciones de instituciones y titulaciones.

Tal vez lo más terrible de esta carta sea el párrafo que refiere a que “la UniCABA, si bien es una única institución, podría funcionar en las distintas sedes que usan hoy los Institutos de Formación Docente de la Ciudad”. Esta afirmación confirma que para la ministra nuestras instituciones se reducen a edificios, desconociendo las personas que las conforman, su vida democrática, sus historias y trayectorias; etc.   Refiere a una “pluralidad de identidades” que justamente desaparecerán tras una única institución, cayendo en una evidente contradicción. Cabe señalarle a la ministra que nuestras instituciones ya se encuentran dentro de los mecanismos democráticos previstos por la Ley de Educación Superior y conforman el sistema de educación superior en términos de lo que la misma ley citada refiere.

Por último, señora ministra, permítame disentir: el proyecto de ley de UniCABA no parte del reconocimiento de la identidad ni de las trayectorias de nuestras instituciones a las que buscar borrar de un plumazo. Por favor no utilice nuestros argumentos para justificar lo injustificable porque todos sabemos que ninguno de su equipo ni Usted misma hablaron de estos temas hasta que vieron la enorme movilización en contra de este proyecto por parte de nuestras comunidades. Sólo ustedes consideran que éste es “un paso que hay que dar”: no lo piensan así nuestros profesorados; no lo piensan así los especialistas más renombrados de nuestro país; no lo piensan así las comunidades que conforman nuestras instituciones; no lo piensan así nuestros jubilados; no lo piensan así muchos legisladores; y podría seguir enumerando. Entonces, ¿por qué lo que piensa su equipo es lo único relevante para tomar decisiones cuando se alzan voces en contrario desde todos los lugares, que ustedes eligen no escuchar y desconocer, e incluso despreciar?

Mandar una carta no es dialogar. Seguimos reclamando que se nos escuche y que se dé un amplio debate público con fundamentos. Arrasar un sistema no puede ser decisión de un grupo de personas que no han explicado hasta ahora nada con claridad y siguen ocultando información, aunque esas personas hayan llegado a sus cargos porque este gobierno fue votado.

(Para conocer la carta original de la Ministra clickee aquí)